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En los años que llevo trabajando en el mercado de nuestro amado #Hass, siempre he visto que la semana 45 marca un punto clave para los mercados. En esta ocasión, tras el cierre de la más reciente versión de Territorio Aguacate en Medellín – Colombia, la semana pasada, se evidenció un impacto fuerte en los principales destinos de exportación.
Hoy las exportaciones colombianas al viejo continente rondan los 150 contenedores semanales, pero los arribos se están encontrando con un mercado que no está reaccionando bien a la oferta. Con los orígenes mediterráneos o de invierno trayendo variedad al escenario, parece que la cuestión no es siquiera de calibres: es el consumo, que por esta época se ha frenado. En mi opinión personal, después de la campaña peruana, las promociones ya no son tan necesarias, y eso también ralentiza el movimiento.
Por otro lado, en Estados Unidos, al cual no está llegando una cantidad representativa de contenedores desde Colombia, el mercado está completamente dominado por México y los precios aún no muestran un repunte interesante.
En el frente local, las compras en campo en Colombia no están especialmente altas. La materia seca de las frutas que van saliendo afortunadamente se mantiene en niveles bajos, pero listas para exportación. Hay altos volúmenes de fruta disponible en Antioquia, Caldas y Valle, con buena oferta, aunque —como mencionábamos al inicio— se respira incertidumbre en toda la cadena: precios de compra, precios de mercado y menos posibilidades de retornos positivos, al menos hasta la semana 50 de cosecha!
En cuanto a la calidad, se enciende una luz amarilla. En temporadas anteriores, con una dinámica de mercado similar, muchos productores optaron por dejar la fruta en el árbol esperando mejores precios, hasta que no hubo más opción que cosechar. Eso generó cuellos de botella en la cosecha, poscosecha y logística de salida. A esto se suma que se aproxima la cosecha de café, lo que dificulta la disponibilidad de mano de obra, y que el clima lluvioso ha hecho aún más retador el panorama para toda la cadena agroexportadora.
Por eso, hay que estar muy atentos a lo que se vaya mostrando en los mercados. Tal vez las procesadoras y el consumo nacional puedan empezar a equilibrar cargas, junto con otros mercados emergentes que se puedan ir sembrando para el futuro.
Un llamado de atención al sector aguacatero: trabajemos en tener una fruta calidad uno A, defendible y consistente, ojalá alineada con los parámetros del programa Avocados From Colombia Quality Program, que seguimos posicionando desde el gremio como una marca país.
Jorge Molina Duque
Gerente de Operaciones Quality Studio CO
jorge.molina@qualitystudio.cl
Colombia





