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En el campo seguimos observando que el precio promedio por kilo de fruta, según las curvas de calibres ponderadas, ronda los COP 2.800. Esta situación, aunque conocida por muchos productores por esta época del año, no es precisamente alentadora.
En particular, para los calibres “baby”, los precios están en torno a los COP 1.000, e incluso algunas exportadoras han dejado de comprarlos. Los calibres medianos se cotizan cerca de COP 3.300 y los calibres grandes, alrededor de COP 6.300.
El panorama se vuelve aún más tenso para ciertos productores que podrían optar por dejar la fruta en el árbol a la espera de mejores precios. Esta práctica no solo pone en riesgo la cosecha principal, sino que también choca con un indicador clave: la materia seca sigue aumentando. Esto implica que, en algún momento, la fruta se vuelve riesgosa para la exportación, dejando mal parado al origen Colombia en los mercados internacionales.
En nuestra próxima columna abordaremos precisamente eso: qué escenarios deberíamos evitar de cara a la próxima campaña colombiana.
En cuanto a los mercados internacionales, la tensión se mantiene. En Estados Unidos, se espera el cierre progresivo de la temporada principal de México, lo que abre espacio para Perú, California y en menor medida, Colombia. Sin embargo, los volúmenes exportados desde nuestro país hacia ese destino “no mueven mucho la aguja”.
En Europa, el mercado spot absorbe toda la fruta en calibres pequeños (26 al 32) que continúan con mejor demanda y precios más estables. Algunas fuentes señalan que esta tendencia podría mantenerse, ya que las llegadas desde Perú tienden a ser de calibres más grandes, lo que nos deja compitiendo con orígenes como Kenia en ese segmento, pero y que hacemos con el resto del árbol?
Según cifras de Corpohass, actualmente el 40% de las exportaciones están yendo a EE. UU., mientras que el restante se dirige a Europa.
Por el lado logístico, aún persisten rezagos por parte de las navieras, especialmente con la escasez de unidades refrigeradas.
Como nos decía una de nuestras fuentes esta semana: “Nos mantenemos con actitud y con fe” buscándole la salida con creatividad, tratando de cambiar una realidad que se repite año tras año. Una frase que resume bien el espíritu del colombiano: resiliente, ingenioso y siempre dispuesto a seguir firmes en la labor.
Jorge Molina Duque
Gerente de Operaciones Quality Studio CO
jorge.molina@qualitystudio.cl
Colombia