Este contenido es solo para suscriptores
México continúa aumentando su volumen exportado a Estados Unidos de una manera consistente, en la semana 37 se mandaron 1,048 embarques lo que es la cantidad más alta para esta temporada que de acuerdo a las estadísticas de México inició el 1 de julio. La demanda por fruta mexicana ha aumentado y tanto productores como empacadores han estado dispuestos a llenar los pedidos.
Los precios de la fruta mexicana también se han ido ajustando según la demanda para cada calibre. Los calibres más grandes, 40s y mayores, se mantuvieron relativamente estables, los 48s han caído en su precio por más de diez dólares, los 60s aunque cayeron durante la semana 37 hacia el fin de semana se notó una pequeña recuperación generando un rebote de al menos USA$3.00/caja. Finalmente la demanda por 70s y 84s se mantuvo fuerte, de hecho la mayoría de los exportadores e importadores han estado buscando estos calibres activamente lo que generó que los precios también aumentaran entre US$3.00 a US$4.00/caja hacia fin de semana, y por lo que se pudo observar la demanda continuará durante la semana 38.
Los precios ofertados al productor siguen siendo atractivos y se espera que el flujo de la fruta sea regular. Sin embargo, la diferencia entre 48s y 60s sigue siendo demasiado grande, más de US$15.00/caja, para ser sostenible. Los calibres 60s y menores ya no tendrán mucho espacio para bajar significativamente de precio por lo que se espera que en los próximos días y semanas sea el 48 el calibre que más bajará de precio conforme siga aumentando la disponibilidad de fruta en México. Igualmente los calibres más grandes deberán irse ajustando en sus precios conforme la disponibilidad aumente que se espera suceda cuando se inicie la cosecha de fruta loca en las huertas con mayor altitud o se inicie el corte de fruta aventajada en las zonas más bajas.
Será muy importante ver la manera en la que se desarrolla la cosecha en México, mientras se mantenga la cosecha de la fruta loca y se mantenga el estricto control sobre el contenido de materia seca de la fruta, se podría esperar que los precios se vayan ajustando paulatinamente y se pueda mantener un adecuado orden en el mercado. Si los exportadores y productores deciden iniciar la cosecha de fruta aventajada, con un contenido de materia seca inferior a la loca y muy en el límite de lo aceptable, se podría esperar que los precios caigan abruptamente en perjuicio de toda la cadena, desde productores hasta importadores. Si la autorización de la cosecha de la fruta aventajada se mantiene bajo los mismos estándares de la fruta loca, que parecieran un poco exagerados, deberíamos tener una transición más ordenada.
Sergio Paz Vega
México