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México mantuvo el volumen de fruta exportada a los Estados Unidos en la semana 35, un total de 925 embarques salieron de México para ese mercado. Los inventarios reportados de fruta mexicana han aumentado considerablemente en los últimos diez días reemplazando principalmente a la fruta de Perú y de Colombia, mientras que los inventarios de California se han mantenido estables y al parecer así seguirán al menos por dos o tres semanas más.
Los precios de la fruta mexicana han ido bajando para los calibres 60s y menores lo que hace sentido al ser los tamaños más abundantes en el campo, principalmente 60s y 70s. Los 32s, 36s y 40s se mantienen demandados pero el mercado ya se dio por enterado que la disponibilidad de estos calibres es muy baja y han ido recibiendo lo que los exportadores pueden reunir a precios consistentes. Los 48s han aumentado ligeramente de disponibilidad llegando a representar sobre el 30% del volumen total de la fruta y aunque el precio de este calibre se había mantenido firme ya para el fin de semana había señales de alrededor de US$2.00 menos por caja de lo que se manejó a inicio de semana. El diferencial de precio entre los 48s y 60s es muy grande, de hecho, pocas veces se ha visto que sea de más de US$25.00/caja o de casi $40 pesos/kilo como ahora. Esta diferencia hace muy complicado para los exportadores ofrecer un precio fijo al productor y las compras por calibre han aumentado, lo que no necesariamente es el caso más común en México.
No se espera que el volumen de México baje en las próximas semanas y tendrá que ir aumentando conforme California se vaya retirando del mercado y de surtir programas de las cadenas de autoservicio. Conforme la cosecha de fruta loca se vaya moviendo a altitudes más elevadas es de esperar que la proporción de fruta grande aumente un poco y el porcentaje de 60s disminuya.
Las exportaciones para otros destinos siguen siendo relativamente bajas con excepción de Canadá que al parecer ha retomado el nivel de demanda regular. Japón deberá estar recibiendo los últimos embarques de fruta de Perú y tendrá que voltear a México para abastecerse por lo menos los siguientes siete meses. Europa sigue siendo un destino que no atrae a todos los exportadores mexicanos, inicialmente se pensaba que México podría exportar volúmenes más significativos a ese mercado durante los meses de agosto a diciembre, ahora ya no es tan claro que esto sucederá.
La temporada de lluvias sigue siendo favorable y los efectos benéficos seguramente serán más evidentes en la fruta de la temporada regular que al menos durante el mes de septiembre no se espera que se inicie a cosechar.
Sergio Paz Vega
México
