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Durante la semana 32 la demanda por fruta mexicana continuó aumentando poco a poco, se mandaron 770 embarques de México a Estados Unidos. El mercado reaccionó de manera significativa desde finales de la semana 31 y durante inicio de la semana 32, días en los que estuvo tomando fruta a precios cada día más elevados. Sin embargo, para la mitad de la semana 32 esta tendencia no solo se terminó, sino que los precios comenzaron a bajar rápidamente resultado de exportadores ofreciendo precios de descuento a importadores para la mayoría de los calibres chicos, 60s y menores los cuales bajaron más de diez dólares por caja para finales de la semana.
Los productores estuvieron dispuestos a vender inicialmente por un alza rápida de los precios, pero después siguieron vendiendo en el volumen requerido con la finalidad de adelantarse a una baja más grande de los precios. Al fin de la semana no se alcanzaba un nivel de estabilidad de los precios en campo.
La cantidad de hectáreas disponibles para cosechar en la semana 33 aumentó un 35% comparado con la semana anterior, pero aún es también un 35% menor a la misma semana del año anterior. Poco a poco la disponibilidad de fruta con un adecuado contenido de materia seca irá aumentando e idealmente la demanda por fruta mexicana también aumentará conforme otros orígenes tengan menos volumen disponible.
Los exportadores comenzaron a surtir programas de detallistas, la transición a la fruta mexicana inició. Aún se mantiene la preocupación en la industria mexicana sobre la limitante de horarios de trabajo impuesta por el departamento de estado a los inspectores del USDA, empresas que trabajan dos o tres turnos diarios en estos momentos están siendo limitadas a trabajar solo un turno, con esta situación las exportaciones mexicanas a Estados Unidos se verán seriamente afectadas.
El mercado de Canadá comenzó a reaccionar después de un letargo de varias semanas, de la misma manera los importadores de Japón y China enviaron sus primeras órdenes para barcos zarpando en la semana 34. Las exportaciones a Europa desde México siguen siendo una interrogante para estas semanas, precios y tamaños de fruta disponibles serán los principales puntos a discutir entre exportadores e importadores.
Todo este incremento en la demanda y retorno a la actividad regular de la industria mexicana del aguacate son muy buenas noticias para todos los integrantes de la cadena, principalmente para los trabajadores de la cosecha, de las plantas empacadoras así como los prestadores de servicios, proveedores de material de empaque y claro, los productores y exportadores.
Sergio Paz Vega
México
